La aparatología que utilizamos es variable según el diagnóstico y plan de tratamiento determinado:

1.-Brackets metálicos: adheridos al diente para realizar sobre este fuerzas ortodónticas. Consiste en una base preparada para cementar sobre el diente y una parte con una ranura por donde pasa el arco. Pueden tener aletas que sirven para colocar el sistema ligado al arco clásico o cajetines que nos permite un autoligado, lo cual nos proporciona fuerzas más suaves, biológicamente mejor aceptadas por las estructuras que rodean y sostienen al diente y unos resultados más rápidos.

2.-Brackets cerámicos o estéticos: brackets transparentes. Especialmente pensados en aquellos casos en los que se quiera sumar un componente estético.

3.-Ortodoncia Interceptiva: es un tipo de ortodoncia preventiva que se utiliza en niños, para guiar o corregir el mal crecimiento de los dientes y de los maxilares. El objetivo es tratar los problemas de maloclusión a una edad temprana, antes de que el crecimiento haya sido completado. Para ello utilizamos ortodoncia fija o removible en niños de corta edad que nos ayuda a redirigir el crecimiento de la cavidad oral y poder preparar la boca para la llegada de la dentición definitiva.  Es una aparatología de resina que tiene múltiples funciones como son la expansión del paladar, el freno del crecimiento óseo, la reeducación de la deglución o la restricción de succión digital, entre otros. 

4.-La ortodoncia invisible es una de las más solicitadas a la hora de corregir las malposiciones dentarias. Es un tratamiento sencillo que consiste en el uso de férulas transparentes extraíbles hechas a medida del paciente y mediante las cuales se consigue corregir la posición de los dientes hasta conducirlos a una posición ideal. Cada dos semanas se procede al cambio en el juego de alineadores responsables del movimiento. Esto permite un desplazamiento gradual de los dientes hasta la posición final.  En una primera visita se hace un estudio completo de la posición inicial de los dientes del paciente, la anatomía de los maxilares, el perfil facial y el patrón oclusal. Para ello, se toman registros fotográficos y escaneados de la boca que se envían a la plataforma de planificación con el objetivo de evaluar, de una forma virtual precisa, la posible progresión del tratamiento.  Una vez revisado y aprobado por nuestro especialista, se procede a la confección de las férulas correctoras personalizadas. A diferencia de los sistemas convencionales, es un tratamiento prácticamente invisible, más cómodo, que permite transformar la sonrisa del paciente de una forma segura y eficaz sin interferir lo más mínimo en su vida cotidiana.

5.-Microtornillos: se utilizan en tratamientos de ortodoncia para conseguir un anclaje adecuado. El término anclaje es muy importante en esta especialidad. En el pasado, era necesario utilizar las piezas dentales posteriores para anclar y poder mover las piezas anteriores. Los mini implantes han revolucionado los tratamientos de ortodoncia. Con ellos podemos crear el necesario anclaje sin apoyarnos en las piezas posteriores, consiguiendo de esta forma corregir problemas que previamente habían sido muy difíciles de solucionar.

6.-Retenedores: una vez terminado el tratamiento, el ortodoncista retira los brackets y coloca retenedores. Estos mantienen los dientes en sus nuevas posiciones hasta que el hueso, las encías y los músculos se adaptan a la nueva relación dental.

7.— En ocasiones, es recomendable la cirugía ortognática, ya que una buena oclusión aumenta la longevidad de nuestros dientes.

8.— Rescate de dientes incluidos.